producción porcina

Las 8 verdades de la producción porcina en España

Enmarcado en la campaña «Let’s Talk About Pork From Europe», la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (Interporc) ha hecho público un comunicado con las ocho verdades del modelo europeo de producción porcina en España.

1. La ley limita el tamaño de cualquier explotación porcina

El tamaño de las granjas en España está limitado por el Real Decreto 306/2020, de 11 de febrero. Asimismo, también está limitada por ley la distancia entre:

  • Dos granjas.
  • Granjas y cascos urbanos.

Las macrogranjas no existen en España. Por otro lado, añaden que «las macrogranjas no existen en España» ya que es término que no se recoge en ningún tratado de zootecnia ni en las disposiciones vigentes del ordenamiento jurídico de España o de la Unión Europea.

2. Responsable (sólo) del 2 % de las emisiones contaminantes

El sector porcino español es responsable aproximadamente del 2 % de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en nuestro país, según estimaciones a partir del Inventario de Emisiones del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.

Además, entre 2005 y 2020 las emisiones de GEI por kilo de carne se redujeron un 41 %.

Por otro lado, todos los agentes de la producción porcina española se han comprometido a alcanzar el impacto climático neutro en 2050, en línea con lo establecido por la estrategia ‘De la granja a la mesa’ del Pacto Verde Europeo.

3. Aplicación controlada de purines en suelos agrícolas

Los purines son un magnífico fertilizante orgánico para las tierras de cultivo debido a que ,ejoran la estructura orgánica del suelo tras años de emplear abonos inorgánicos.

Las normativas española y europea regulan dónde, cómo y cuándo aplicar los purines, no pudiendo sobrepasar los:

  • 170 kg de nitrógeno por hectárea y año en las zonas vulnerables.
  • 210 kg en el resto.

Esta limitación viene fijada por el Real Decreto 261/1996, de 16 de febrero, sobre protección de las aguas contra la contaminación producida por nitratos procedentes de fuentes agrarias.

Además, cada granja está obligada a disponer de un plan de producción y gestión de estiércol incluido dentro del Sistema Integral de Gestión de Explotaciones (SIGE) de ganado porcino.

Como dato, Interporc añade que en los últimos años el sector ha logrado recudir el volumen de purines y residuos finales en un 30 %.

4. Obligación de disponer de balsas cercadas e impermeabilizadas

Las granjas están obligadas a disponer de balsas cercadas e impermeabilizadas para evitar el riesgo de filtración y contaminación de las aguas superficiales y subterráneas.

5. El agua consumida por la producción porcina representa el 0,05 % del total disponible en España

El agua total consumida al año por el sector porcino es 54 hm3, lo que representa solo el 0,05 % del total de agua disponible en España.

Los ganaderos y las industrias del sector porcino están implicados en la optimización de su consumo: en los últimos años, se ha logrado reducir un 30 % su uso por kilo de carne producido.

Según un estudio de la Universidad de Twente, el 82 % de la huella hídrica de la carne de cerdo a nivel mundial se corresponde a agua verde: agua de lluvia almacenada en el suelo, evaporada por las plantas y que no es de consumo humano.

6. Reducción de un 58,8 % del uso de antibióticos desde 2014

Ganaderos y veterinarios han logrado reducir en un 58,8 % el uso de antibióticos entre 2014 y 2019. El sector, adherido al Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), está comprometido con el Pacto Verde Europeo que marca el ambicioso objetivo de rebajar un 50 % el uso de antibióticos en los próximos diez años.

Además, el sector porcino, a través de Interporc, es firmante de la Red Española del Pacto Mundial de las Naciones Unidas para la consecución de los Objetivos para el Desarrollo Sostenible del Milenio, y trabaja en iniciativas para seguir reduciendo el uso de antibióticos, con iniciativas como el proyecto MAPRESPORC.

7. La producción porcina es un motor económico de la España rural

El sector porcino es un motor económico de la España rural donde está plenamente arraigado. En municipios de menos de 5.000 habitantes están instaladas:

  • El 43 % de las granjas.
  • El 45 % de las industrias.

Unas instalaciones que, en total, emplean a unas 60.000 personas. Así, contribuye a generar riqueza y empleo, al desarrollo de infraestructuras, a dar vida, y, por tanto, al progreso de estos municipios.

8. La normativa de bienestar animal más exigente del mundo

El modelo europeo de producción porcino cuenta con la normativa en bienestar animal más exigente del mundo, cumpliendo con los principios de la Organización Mundial de Sanidad Animal, englobados en el Convenio Europeo para la Protección de Animales en Granjas ganaderas.

Además, España ha dado un paso más allá con una regulación más garantista, tal y como se marca en el Real Decreto 1135/2002 de 31 de octubre, relativo a las normas mínimas para la protección de cerdos.

Mientras que el sector, a través de Interporc, impulsa el sello de certificación IAWS que avala las buenas prácticas en todos los eslabones de la cadena.

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