proteína

¿Cuál es el potencial de Australia en el sector de la proteína?

La proteína es un macronutriente esencial para la vida y AgFunderNews publica un artículo de opinión relacionado con el futuro de este sector en Australia.

El consumo mundial de proteínas ha aumentado un 40 % desde el año 2000 y se espera que este crecimiento de la demanda aumente aún más. El mercado mundial de proteínas podría tener un valor de hasta 373 mil millones de dólares en 2025.

Para entonces, según la autora de este artículo, la proteína:

  • Animal será el componente más importante por valor.
  • De origen vegetal representará el mayor volumen.
  • De fuentes no tradicionales (origen celular y los insectos) emergerá como la categoría de más rápido crecimiento, aunque parte de un lugar muy alejado de los primeros puestos.

La demanda de proteína tradicional se va a mantener fuerte debido a la continua expansión de la población nacional y la creciente clase de consumidores en las economías emergentes.

Por su parte, el número de puestos de trabajo relacionados con la creación de proteínas vegetales y alternativas podría aumentar en unos 6.000 a alrededor de 17.000 para 2030, con un potencial de valor añadido de 5.000 millones de dólares australianos (3.640 millones de dólares).

El papel de los distintos tipos de proteína dentro de la industria agroalimentaria

La autora tiene claro que el mercado emergente de proteínas vegetales y alternativas no representa una amenaza para la producción tradicional de proteínas animales.

Pero, por otro lado, también afirma que ofrece oportunidades reales y significativas para que los agricultores australianos de granos diversifiquen sus sistemas de producción y llenen el creciente déficit global de proteínas de una manera sostenible.

Además, en su opinión, la oportunidad para los productores y fabricantes nacionales en el mercado tradicional de proteínas animales es enorme.

En resumen, considera que Australia tiene una oportunidad real de tener un próspero sector local de fabricación de alimentos, al mismo tiempo que se convierte en un exportador líder de proteínas tradicionales, vegetales y otras alternativas.

Con una demanda de proteína mayor que la oferta, Australia tiene margen para, al mismo tiempo,:

  • Ampliar las fuentes tradicionales.
  • Buscar fuentes nuevas y sostenibles.

Para aprovechar al máximo las posibilidades, los productores de alimentos australianos deberían explorar colaboraciones más profundas con otros actores a lo largo de la cadena de valor, como empresas procesadoras de alimentos, investigadores, nutricionistas y proveedores de tecnología.

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